Buenos Aires por Una Nueva Evangelización

Hola Banuev, ¿cómo están? Espero que bien.

Mi nombre es Ivana D’Alessandro y fui una de las encargadas de organizar la convivencia de este año. Mi área específica fue la de Espiritualidad y disfruté mucho cada momento.

Les cuento algo: nunca antes había participado de la convivencia o del multifestival. Mi acercamiento a Banuev se produjo a través de mi hermana Erica, que integra el área Teatro y que me tentó con la idea de ir a Roma para representar la obra "Hechos de los Apóstoles" en la Jornada Mundial de la Juventud que se realizó en agosto. Acepté, y además de vivir una de mis experiencias más fuertes como miembro de la Iglesia,

descubrí un montón de personas geniales unidas por un objetivo maravilloso: evangelizar de una manera diferente, por medio del arte.

Cuando me pidieron colaboración para organizar la convivencia no lo dudé, porque sentí que podía devolver un poquito de toda esa fuerza que había recibido.

Formamos un equipo de trabajo bárbaro. En las reuniones intercambiamos ideas, juntamos inquietudes y tratamos de mejorar convivencias anteriores. Teníamos muchas expectativas y nos comprometimos a dar lo mejor de nosotros para que todo saliera perfecto.

Durante los tres días me sentí muy cómoda y acompañada. El clima de comunión que formamos entre todos fue tan sincero que desde el primer momento me pareció estar entre amigos. Amigos que se encontraban para compartir sus logros de todo un año de esfuerzos y para recargar las pilas de los nuevos proyectos.

Quiero rescatar sus brazos siempre dispuestos a ayudar y su excelente predisposición para participar de los talleres o de las oraciones que planeamos pensando en ustedes. También su increíble respeto por los horarios que, si bien no son agradables, sirvieron para que disfrutáramos cada momento al máximo y no nos perdiéramos nada sobre todas las cosas, la alegría de estar todos reunidos, la paz de la oración y el sentimiento de pertenencia a un grupo, el grupo de aquellos que decidieron convivir un fin de semana para fortalecer el compromiso individual de comunicar nuestra fe.

Quiero agradecer a Dios por haberlos conocido, a Banuev por permitirme contribuir en la preparación de esta fiesta, y a todos los que vinieron, por haber dejado una huella tan importante en mi vida.

Deseo que nos reencontremos el año que viene, e invito a todos los que no pudieron venir a estar atentos para no faltar a la próxima convivencia, en la que festejaremos la realización del décimo Multifestival.

Gracias por haberme hecho sentir tan bien.

Los quiero mucho. Hasta prontito,

Ivana